Nueva caída en la bolsa española después del petardazo del martes en el que se hundió un 5,4%.
¿Qué ha pasado? ¿Se ha hecho algo mal en las últimas fechas? ¿Qué? ¿Quién?
Los telediarios nos responden como una bandada de papagayos: bbbbrrra, brrra,... ha sido por lo de Grecia..., bbbbraaa, brrrra. Y una vez más, ggggrrrrrra, ggrra,... ha sido por lo de Grecia.
Nada ocurre, al menos en Economía, por un acontecimiento aislado ajeno a todo lo que nos rodea. Se encuentra uno, siempre que analice a fondo, una trastienda que nos lleva mucho más allá de esa chispa que despierta la primera llama.
En este caso lo que ocurre es que hay quienes ponen frente al espejo a Grecia y éste les refleja algo que se le parece mucho a nuestro simpático país. Y es que es natural: Standard & Poors sigue valorando a la baja los bonos españoles, el gobierno sube la tasa impositiva del IVA, anuncia que vamos a tener que tributar por las ayudas del Plan-E a la compra de vehículos, Zapatero y Rajoy se reúnen en solitario para hablar del préstamo a nuestros 'compis' mediterráneos..., ¿ein? ¿acaso le vas a negar a la Comisión Europea tu parte del crédito? Mmmmm, todo muy rarito.
Si queremos crecer, si hay que estimular la demanda, si TODOS los países desarrollados salvo precisamente Grecia están apostando por políticas fiscales expansivas consistentes en bajar impuestos o aumentar el gasto público, ¿por qué nosotros hacemos lo opuesto? ¿es que "Papá Estado" tiene los bolsillos semi-vacíos?
Quizás no dé para temérselo pero al menos da para planteárselo, no me digan que no.
Es comprensible dentro de nuestras fronteras que nos importe poco cada vez que nuestro presidente nos engaña, (negociaciones con ETA, subida de las pensiones por jubilación, retirada de tropas,...) es razonable que nosotros confiemos en que todo marcha mejor de lo que cabría esperar en un 20% de paro. Podemos controlar lo de dentro pero ay! qué pensarán al otro lado de los Pirineos.
Hizo bien nuestro máximo mandatario en atajar inmediatamente con los rumores de un problema que no debería dar para tanto al menos por el momento. El inconveniente es que cuando él sale a la palestra Mundial pesa menos que papel de periódico, sus palabras se las lleva el viento. No pidas confianza (672.000 resultados en google) cuando tus actuaciones discrecionales marcan lo contrario.
¿Qué ha pasado? ¿Se ha hecho algo mal en las últimas fechas? ¿Qué? ¿Quién?
Los telediarios nos responden como una bandada de papagayos: bbbbrrra, brrra,... ha sido por lo de Grecia..., bbbbraaa, brrrra. Y una vez más, ggggrrrrrra, ggrra,... ha sido por lo de Grecia.
Nada ocurre, al menos en Economía, por un acontecimiento aislado ajeno a todo lo que nos rodea. Se encuentra uno, siempre que analice a fondo, una trastienda que nos lleva mucho más allá de esa chispa que despierta la primera llama.
En este caso lo que ocurre es que hay quienes ponen frente al espejo a Grecia y éste les refleja algo que se le parece mucho a nuestro simpático país. Y es que es natural: Standard & Poors sigue valorando a la baja los bonos españoles, el gobierno sube la tasa impositiva del IVA, anuncia que vamos a tener que tributar por las ayudas del Plan-E a la compra de vehículos, Zapatero y Rajoy se reúnen en solitario para hablar del préstamo a nuestros 'compis' mediterráneos..., ¿ein? ¿acaso le vas a negar a la Comisión Europea tu parte del crédito? Mmmmm, todo muy rarito.
Si queremos crecer, si hay que estimular la demanda, si TODOS los países desarrollados salvo precisamente Grecia están apostando por políticas fiscales expansivas consistentes en bajar impuestos o aumentar el gasto público, ¿por qué nosotros hacemos lo opuesto? ¿es que "Papá Estado" tiene los bolsillos semi-vacíos?
Quizás no dé para temérselo pero al menos da para planteárselo, no me digan que no.
Es comprensible dentro de nuestras fronteras que nos importe poco cada vez que nuestro presidente nos engaña, (negociaciones con ETA, subida de las pensiones por jubilación, retirada de tropas,...) es razonable que nosotros confiemos en que todo marcha mejor de lo que cabría esperar en un 20% de paro. Podemos controlar lo de dentro pero ay! qué pensarán al otro lado de los Pirineos.
Hizo bien nuestro máximo mandatario en atajar inmediatamente con los rumores de un problema que no debería dar para tanto al menos por el momento. El inconveniente es que cuando él sale a la palestra Mundial pesa menos que papel de periódico, sus palabras se las lleva el viento. No pidas confianza (672.000 resultados en google) cuando tus actuaciones discrecionales marcan lo contrario.
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